Calesita

sábado, 30 de abril de 2016

Antonio Socci no se guarda nada


Una Acusación Histórica. Un repaso de ”La Profezia Finale” de Antonio Socci: Introducción na vez más, el católico italiano y reconocido intelectual, Antonio Socci causó un fuerte impacto en la “masa” católica gracias a explosivas revelaciones que confirman el diagnóstico de la actual crisis en la Iglesia tradicionalista y en los círculos de “Fátima”. A diferencia de muchos de sus colegas y comentaristas católicos, Socci no se Socci no se abstiene de publicar lo que la honestidad intelectual requiere respecto de nuestra situación. Por eso surgió su Cuarto Secreto de Fátima, que expuso al público la cuantiosa evidencia sobre la falla del Vaticano en revelar el Tercer Secreto completo y abiertamente ante el ojo público, de donde no desaparecerá. De la misma manera, su trabajo Non é Francesco (No es Francisco, un juego de palabras con el título de una canción italiana de música pop) enfrentó valientemente el desastre del actual pontificado, aunque uno objete los dudosos argumentos de Socci contra la validez de la elección del Cardenal Bergoglio (tal como el mismo Socci parece haber hecho).  


jueves, 28 de abril de 2016

Desolación, Ceguera y Exasperación


Leemos en el Catholic Herald:
El Obispo de Wrexham, anuncia el cierre de 22 iglesias en 2020, dice que algunos cambios comenzarán 'en cuestión de semanas'. 1
Ante esta drástica decisión, que señala una iglesia no solo en profunda crisis, sino en franca retirada, el Obispo Pedro Brignall, señala como ve este fracaso, y esto es lo más preocupante:
...para todos nosotros será un reto, pero creo firmemente que también una enorme oportunidad de renovación.
...las comunidades tendrán que buscar de nuevo la forma en que vivimos la vida parroquial, porque la Iglesia Católica en el norte de Gales es profundamente misionera. 2
Brignall cierra un tercio de sus iglesias y dice que su diócesis es profundamente misionera y que está en vías de una enorme oportunidad de renovación.
LA RENOVACIÓN DE UN CADÁVER. – ¿Quién duda que la muerte, es una gran posibilidad de renovación? El cadáver se renueva minuto a minuto, hasta pulverizar su misma osamenta.
Esto me recuerda aquellos equipos de fútbol que al perder por un solo gol de diferencia dejan su área y en el último minuto salen todos al área contraria ante la posibilidad de meter un cabezazo al arco rival en un córner.
Esto me recuerda el servicio misionero del heresiarca Bergoglio, y su énfasis de sacar la iglesia de su encierro para lanzarla a las misiones.
Esto me recuerda los manotazos del ahogado.
Esto demuestra la profunda ceguera de esta generación conciliar, y la incapacidad supina para darse cuenta de lo que está sucediendo.
EL OPTIMISMO INGENUO. – Ya no sabemos, si llorar o reír ante esta inútil generación conciliar. Todos nacimos en la primavera del 60, o como lo llaman algunos, los años del optimismo ingenuo. Todo sería maravilloso. El Concilio haría soplar su espíritu y renovaría la Iglesia. Ninguno veía o quería ver las tinieblas que se aproximaban. Pero ya se me pasó este optimismo ingenuo, se me pasó hace mucho tiempo; pero para ciertos ciegos, siempre está presente. Por esto The Remnant, ironiza la noticia diciendo:
Ah, ¿pero no es maravillosa la primavera?...
Esto es fabuloso. Y unos años después de esto, no habrá ningún sacerdote en toda la izquierda en Gales. Y sólo imaginar, ¡qué increíble oportunidad de renovación será! 3
GENERACIÓN CADUCA. – Cuando afirmamos que esta generación conciliar está en vías de extinción, lo hacemos con estadísticas y hechos en la mano; nadie puede pedirnos y mucho menos obligarnos a que seamos ciegos como esta generación.
A TODO O NADA. – La desolación, el retroceso, o el fracaso de los renovadores conciliares los pone en una situación exasperante, es lo que vivimos en estos años. La generación conciliar, dentro de su puro voluntarismo, se juega al todo o nada. Corren todos a cabecear el último córner de las misiones en el área rival. Esto explica las amenazas de excomunión para quien se arrodille al comulgar, junto a la renovación de la renovación...; pero la desolación avanza, la idolatría se introduce lentamente y la profanación no se detiene. Todos fenómenos surgidos de una sola matriz: el espíritu conciliar.
Solo está ciego, quien no lo ve.


1 http://www.catholicherald.co.uk/news/2016/04/22/a-third-of-catholic-churches-across-north-wales-are-to-close/#.Vx0Q81Rw6WE.email
2 Ibídem.
3 http://remnantnewspaper.com/web/index.php?option=com_k2&view=item&id=2477:springtime-update-one-third-of-all-catholic-churches-in-north-wales-to-close

martes, 26 de abril de 2016

Calamidad y Papado Aparente


Luego de tres largos años del nominado Franciscus, al que se lo cree papa, comienza lentamente la catolicidad a reconocerlo como portador de herejías. Esto han demostrado los sacerdotes que elaboraron El Denzinger Bergoglio. También lo hemos demostrado aquí en nuestro artículo anterior, cuando analizamos la estructura mental de su empobrecido y débil razonamiento. Si el hábito no hace al monje, mucho menos la sotana blanca hace al papado.
Del fenómeno Franciscus, la razón católica comienza a indagar dentro de la historia, donde han pensado o mas bien especulado muchos teólogos sobre la posibilidad de un Papa hereje, como es nuestro triste presente.
Chris Jackson en The Remnant en su artículo Papas, Papasaparentes y antipapas, exhuma un texto de William George Ward escrito en 1868, donde hace referencia a estas tres clases de papados. El Papa real, es aquel que así es reconocido por Dios; el Papa aparente, reconocido por el orbe cristiano como papa, pero que en realidad no lo es; y por último, la categoría de los antipapas. A estas tres categorías, deberíamos agregar la novedad impuesta por la actual Revolución Vaticana: el Papa emérito, o jubilado.
De este último, no se habla, si bien estamos ante uno de los fenómenos más vergonzosos de este gobierno vaticano: presionar un papa para quitarle su Secretario de Estado y reducirlo a una figura decorativa, hasta alabarlo por retirarse con una jubilación digna.
El artículo cuya traducción puede verse desde este sitio, es algo complejo en su montaje, pues el autor pretende callar, y dejar hablar un escrito de 1868, es decir, un razonamiento anterior a toda discusión papal, como asimismo anterior a todo modernismo. En él se plantean varias preguntas con sus respectivas respuestas. Por nuestra parte, agregamos otras:
¿Puede el Pontífice convertirse en un hereje formal?
Bannez, Valentia, y Laymann responden afirmativamente; Tannery Viva piensan que es incierto; Bellarmine y Wiggers lo encuentran probable—Suárez más probable aún—que el Señor no lo permita. Cita que ni un teólogo considera cierto que un Papa no pueda convertirse en un hereje formal; pero agrega con razón, que el hecho de que tal circunstancia no haya ocurrido durante siglos incrementa la probabilidad de la opinión más favorable. El Dr. Murray agrega como verdad aceptada por todos, que el Papa puede caer materialmente en el error dogmático e incluso en la herejía.
¿Acaso esta posibilidad está reñida con el dogma de la infalibilidad pontificia? Y el artículo afirma:
...los Ultramontanos modernos agregaron otro dogma totalmente distinto, es decir, que ningún Papa puede caer en la herejía...
...Habría sido muy extraño si los teólogos medievales hubieran sostenido que ningún Papa podía caer en la Herejía;...
...ningún Papa se volvió un hereje formal; y como consecuencia, la opinión y esperanza piadosas han difundido crecidamente que Dios siempre preservará a la Iglesia de tal calamidad.
Así es, Dios preservó su Iglesia de tal calamidad, pero si la Iglesia no se preserva a sí misma, no espere que Dios haga lo que la Iglesia debe hacer. En otras palabras, si no se condenan los errores, si no se excomulga a los impíos, a los lobos disfrazados, no esperen que Dios lo haga. Medio siglo fue suficiente, para que se observe un hereje en la silla de Pedro, ¿por qué? Porque no se condenó la herejía, peor aún, se convive con ella, se la alaba y hasta se la estimula. Ahora, la Iglesia debe buscar su propia medicina, contra esta calamidad bergogliana.
¿Qué sucedería, si un Papa fuese hereje? A esta pregunta responde el artículo:
Dado que los medievales consideraban un hecho cierto que un Papa podía caer en herejía, la pregunta a enfrentar era qué resultaría de tal fenómeno. Por lejos, como señala el Sr. Renauf (pp. 34- 37), la opinión más frecuente parece haber sido que “dejaría de ser Papa al dejar de ser católico”. Entre nosotros, si bien es indefinidamente más probable que Dios jamás permitirá tal calamidad, nos inclinamos con timidez hacia la opinión medieval; nos inclinamos a pensar que “por el mismo hecho de caer de la fe de Pedro, “podría” caer de la silla y sede de Pedro ” (p. 33).
¿Y qué pasa entonces con tal Papa que ha caído de la silla de Pedro?
Un Papa puede—hipotéticamente—profesar la herejía formal; y que a su vez tal profesión resulte generalmente desconocida. En verdad ha dejado de ser Papa, pero universalmente es reconocido como Papa.
Estamos ante el caso de un Papa aparente, y aquí el artículo alude a este supuesto caso:
Lord Macaulay supone que, en el tiempo en que las hordas de bárbaros eran bautizadas en masa, unos diez o veinte pudieron no haber recibido un bautismo válido. Uno de estos luego siguió el camino de la ordenación y consagración, y fue considerado obispo; luego de un tiempo fue nombrado al Pontificado. No es un Papa verdadero, y sin embargo todos lo reconocen como tal.
Destaco el caso, pues el papado aparente, es hoy una realidad que muchos ya ven con claridad. Aparente, por muchos motivos.
1. Por la dudosa renuncia de un Papa hoy emérito o con jubilación destacada; o como lo llamamos ya en 2013, usando la terminología de la filosofía alemana: el Papa Dasein.
2. Por su herejía manifiesta luego de tres años.
3. Por su adhesión manifiesta a los conspiradores de San Gallo.  
El motivo, es hoy lo de menos, la realidad es una: Francisco es hereje y por de pronto no es Papa o ya no es Papa.
¿Que sucedería si un Papa aparente enseñase una herejía? Y se expide el artículo:
...el Papa aparente ya no es un “pastor” sino que queda expuesto como “lobo”. Así explica Valentia la doctrina de Torquemada. “Grandes autores admiten que [un Papa aparente] puede desear imponer sobre otros su herejía personal, que tristemente es tal.” Agrega que “esto no implica daño a la Iglesia. Dado que ella, sabiendo que por la herejía manifiesta el Pontífice ha caído de su autoridad y enseña contrariamente a la fe de la Iglesia, tenderá a huir de él.”
...la Iglesia, tenderá a huir de él. En otras palabras, llegamos a la Plaza de San Pedro vacía, como una señal visible de la desolación introducida en la Iglesia Católica. El fenómeno es evidente, el sensus fidei reconoce abiertamente que el pastor, si bien lleva sotana blanca, ya no emite la voz de Jesucristo y por ende, diciéndolo con las categorías bergoglianas, no tiene olor a oveja.



martes, 19 de abril de 2016

La Herejía Bergogliana


Todo hombre es filósofo, si en él radica el amor a la verdad; y todo religioso es teólogo, pues de una u otra manera se manifiesta el núcleo ordenador de su pensamiento acerca de Dios.
Luego de tres años, podemos diseñar el sistema filosófico, y por ende teológico de J. M. Bergoglio.
Explicitado su núcleo de pensamiento, todos los temas no harán sino refrendarlo y confirmarlo.
La teología bergogliana, es simple, y fácilmente reconocible. No es Bergoglio un pensador profundo, sino un dialéctico pragmático, donde las ideas complejas ocupan muy poco espacio: esto hace sumamente sencillo nuestro análisis.

sábado, 9 de abril de 2016

La Pan-Misericordia


¿Qué cambios se dan en el pensamiento cuando alguien ha comprendido a fondo la dialéctica bergogliana? ¿Qué es lo que subyace en el subconsciente de las palabras en las homilías bergoglianas? ¿Cómo aflora su discurso del núcleo central de su pensamiento dialéctico?
Vayamos a un ejemplo, leyendo parte de la Homilía del Domingo 3 de abril de 2016 1, ya imbuidos y empastados de esta novedosa dialéctica ideológica, mezcla Hegel, mezcla yin yang y mezcla del Cambalache de Discepolo.

martes, 5 de abril de 2016

Catena Plumbea in Ioannem 19,25-27


Sigue esta Catena Plumbea, es decir, esta Cadena de Plomo; pues donde Bergoglio interviene, el oro se hace plomo. Hay mucho plomo en su boca, y la Cadena de Plomo no se puede cortar...


Y estaban junto a la cruz de Jesús, su Madre y la hermana de su Madre, María de Cleofás y María Magdalena. Y como vio Jesús a su Madre, y al discípulo que amaba, que estaba allí, dijo a su Madre: "Mujer, he ahí a tu Hijo". Después dijo al discípulo: "He ahí a tu Madre". Y desde aquella hora el discípulo la recibió por suya. (Juan 19,25-27)

Crisóstomo, in Ioannem, hom. 82
Y admira cómo el sexo débil de las mujeres, aparece aquí más varonil, firme junto a la cruz, cuando los discípulos huían.
San Ambrosio, in epistolis
María, Madre del Señor, estaba ante la cruz de su Hijo. Nadie me enseñó esto, sino San Juan Evangelista. Otros describieron el trastorno del mundo en la pasión del Señor; el cielo cubierto de tinieblas, ocultándose el sol y el buen ladrón recibido en el Paraíso, después de su confesión piadosa. San Juan escribió lo que los otros se callaron, de cómo puesto en la cruz llamó Jesús a su Madre, y cómo considerado vencedor de la muerte, tributaba a su Madre los oficios de amor filial y daba el reino de los cielos. Pues si es piadoso perdonar al ladrón, mucho más lo es el homenaje de piedad con que con tanto afecto es honrada la Madre por el Hijo: "He aquí tu hijo". "He aquí a tu Madre". Cristo testaba desde la cruz y repartía entre su Madre y su discípulo los deberes de su cariño. Otorgaba el Señor, no sólo testamento público, sino también doméstico; y este testamento era refrendado por Juan. ¡Digno testimonio de tal testador! Rico testamento, no de dinero, sino de vida eterna; no escrito con tinta, sino con el espíritu de Dios vivo (2Cor 3) y pluma de lengua, que escribe velozmente (Sal 44:2). Pero María se mostró a la altura de la dignidad que correspondía a la Madre de Cristo. Cuando huyeron los Apóstoles, estaba en pie ante la cruz, mirando las llagas de su Hijo, no como quien espera la muerte de su tesoro, sino la salvación del mundo. Y aun quizás porque conociendo la redención del mundo por la muerte de su Hijo, ella deseaba contribuir con algo a la redención universal, conformando su corazón con el del Salvador. Pero Jesús no necesitaba de auxiliadora para la redención de todos los que sin ayuda había conservado. Por eso dice: "He sido hecho hombre sin auxiliador, libre entre los muertos" (Sal 87:5). Aceptó, en verdad, el afecto maternal, pero no buscó el auxilio ajeno. Imitad, madres piadosas, a ésta, que tan heroico ejemplo dio de amor maternal a su amantísimo Hijo único. Porque ni vosotras tendréis más cariñosos hijos, ni esperaba la Virgen el consuelo de poder tener otro.
San Agustín, in Ioannem, tract., 119
Esta es, sin duda, aquella hora en la que, habiendo de convertir el agua en vino, había respondido Jesús a su Madre: "Mujer, ¿qué hay común entre ti y mí? aun no ha llegado mi hora" (Juan 2:4). En aquella ocasión en que debía empezar a obrar milagros, no la reconoció como Madre de su divinidad, no siéndolo mas que de su débil humanidad, pero ahora que ya padece en su humanidad, honra con sentimiento humano a aquella, de la que había sido hecho hombre. Esta es una instrucción y ejemplo que nos da el buen Maestro, para enseñarnos los oficios de piedad que los hijos deben a sus padres, y así convirtió en cátedra de maestro la cruz en que estaba clavado.
Crisóstomo, in Ioannem, hom. 84
Observa cuán tranquilamente dispone todas las cosas, en el momento de estar en la cruz, hablando a sus discípulos de su Madre, cumpliendo las profecías y prometiendo el cielo al buen ladrón. Antes de ser crucificado, se le ve temblar, pues entonces demostraba la debilidad de la naturaleza; pero ahora ostenta la grandeza de su poder. Así nos enseña, que si nos conturba la adversidad, no por eso desistamos. Y cuando hubiéramos entrado en la lucha, soportarlo todo como cosa fácil y ligera.
San Agustín, ut supra
Como proveía a su Madre, en cierto modo, de otro hijo por el que la dejaba, manifestó el motivo en las siguientes palabras: "Y desde aquella hora el discípulo la recibió como suya". ¿Pero en qué recibió Juan como suya a la Madre del Señor? ¿Acaso no era de los que habían dicho a Jesús: "He aquí que nosotros lo hemos dejado todo, y te hemos seguido" (Mat 19:27)? La recibió, no por sus propiedades (pues nada tenía propio), sino en los cuidados que solícito la había de dispensar.
Bergoglio in Sancta Martha 20/12/2013
[María] Era silenciosa, pero dentro su corazón, ¡cuántas cosas decía al Señor! “Tú, aquel día —esto es lo que hemos leído— me has dicho que serás grande; tú me has dicho que le habrías dado el Trono de David, su padre, que habría reinado por siempre ¡y ahora lo veo allí!” ¡La Virgen era humana! Y quizás tenía ganas de decir: “¡Mentira! ¡He sido engañada!”
Bergoglio in cýmbalis benesonántibus 30/05/2015
Muchas veces pienso en la Virgen, cuando le dieron el cuerpo muerto de su Hijo, tan destrozado, escupido, ensangrentado, sucio. ¿Qué hizo la Virgen? ¿Lleváoslo? No, lo abrazó, lo acarició. Tampoco la Virgen lo entendía. Porque, en aquel momento, se acordaría de lo que el Ángel le había dicho: Será Rey, será grande, será profeta, y dentro de sí, con aquel cuerpo —tan herido, que había sufrido tanto antes de morir— en sus brazos, por dentro seguramente tendría ganas de decir al Ángel: ¡Mentiroso! ¡Me has engañado!

sábado, 2 de abril de 2016

Dialéctica de la misericordia bergogliana

El buen Pastor. Catacumba de Priscila. Siglo III.
Este falso papado no es teológico, tampoco es doctrinal, es dialéctico. Lo único que le importa es el modo en como se mueve la acción; pues la acción genera las formas, y estas formas gestan las nuevas esencias.
LAS DOS CARAS DE LA MONEDA. – Por tal motivo, todo se presenta en forma dialéctica, pero con esa dialéctica que por momentos es hegeliana y en otros es el yin yang del taoísmo. De allí que Kasper y Bergoglio vayan del brazo, como las dos caras de la misma moneda. Kasper es la cara germano intelectualoide de la dialéctica hegeliana, y Bergoglio es el tango de la dialéctica pragmática.