Calesita

martes, 28 de mayo de 2019

Otro fracaso


Luego de las últimas elecciones europeas en Italia, emerge un gran perdedor: Bergoglio, metamorfoseado en el Francisco. Como de costumbre, el necio porteño, pensó que su orden era suficiente para que todos los católicos italianos se plegaran a su política, es decir, votar por la izquierda democrática y seguir introduciendo musulmanes en la península. La Conferencia Episcopal Italiana, títere de sus órdenes se plegó a la Revolución Vaticana, pero el pueblo italiano no la escuchó y le dio la espalda. Los italianos eligieron como en un plebiscito: o la política del porteño o la realidad; y eligieron la realidad.
Bergoglio no se ha percatado todavía que el pueblo italiano, no está hecho de jesuitas (a Dios gracias), donde se da una orden y todos obedecen en silencio, aunque de mala gana.
Este es el fin del político Bergoglio, donde el porteño solo ve acumular en su torpe revolución, fracaso tras fracaso, sin darse por vencido.
El gato siempre cae parado, y previendo su derrota, habría tratado de caer en pie, afirmando que Italia no puede absorber todos los migrantes musulmanes. Es su táctica de la paradoja de los opuestos, donde por las circunstancias se afirman dos opuestos al mismo tiempo; tal como hizo con la tradición, negando las tradiciones un día y afirmándolas ante los ortodoxos al otro día. Típico de su derruida personalidad, carcomida por las dudas que le asaltan.
Los blogs italianos exultan por su derrota, y alaban a Salvini, Ministro del Interno, quien encomendó Italia al Corazón Inmaculado de María. Por supuesto, los jesuitas se pusieron nerviosos, lo mismo que el Vaticano, y lanzaron anatemas verbales sobres su persona.
Si esta elección fue un plebiscito en Italia sobre la migración indiscriminada de musulmanes, debemos decir, que Salvini ganó y Bergoglio salió derrotado. Por supuesto, la prensa oficial argentina, hizo mutis por el foro, sacando el diario La Nación, donde escribe la Piquè, una pobre mujer que no ve más allá de sus ruleros, y lo hizo con toda saña usando calificativos, que dicho periódico debería poner freno. Como sus adjetivos de xenófobo y ultraderechista, pues el periódico pierde calidad, además de enemistarse con los italianos, he aquí algunos ejemplos:
Salvini,... el líder de la xenófoba y ultraderchista Liga...
...aparecieron repentinamente en actos de Salvini opositores que, disfrazadas de Zorro, manifestaron en forma pacífica e irónica su rechazo a sus posturas de extrema derecha y xenófobas
En este clima electoral marcado por una batalla entre dos visiones de Europa y de Italia, el Papa argentino -defensor de pobres, excluidos e inmigrantes-, quedó involucrado, … 1
Piqué, no digas mentiras. No quedó involucrado, se involucró solo el muy tonto, y obligó a la Conferencia Episcopal Italiana a involucrarse; ahora no sabe como salir a flote. Ser Papa no se agota con ser -defensor de pobres, excluidos e inmigrantes- es algo más, algo que él no tiene y que los católicos encontraron en Salvini, con un catolicismo sui generis. Ahora ya puede decir Bergoglio que le robaron el rosario que nunca le vemos o el crucifijo que cambia por signos de los chamanes; mientras tanto el “Zorro” ahora puede reclamar los derechos a comunistas y socialistas por usar su imagen en la campaña política. Como Salvini había declarado que en su infancia le habían robado un Zorro, el metamorfoseado partido comunista arremetió contra él con la imagen que vemos en la portada.
Como dicen algunos, Bergoglio es un fracaso, como Papa, como político y ahora como Zorro, siendo vencido por un simple sargento García.
¡Qué vergüenza! Ser derrotado por un xenófobo y ultraderechista.



No hay comentarios:

Publicar un comentario